lunes, 7 de diciembre de 2009

papas para julia

Ayer cociné para Julia, Germán y Job. Pollo con almendras y papas al roquefort. Nunca había hecho ninguna de las dos cosas pero mi creatividad culinaria dio buenos resultados. Las papas estaban buenísimas. El pollo estaba bien. Julia me pidió que le pasara la receta, así que en vez de escribirsela en un mail la voy a escribir acá para compartirla con el mundo.

es así:

Primero cortás como un kilo y medio o dos kilos de papas en cuadrados chiquitos y los ponés a hervir. Mientras tanto ponés en un jarrito como 9 o 10 cm de leche (no cúbicos si no reales) y una cucharada de harina para hacer salsa blanca. Disolvés la harina y la ponés en el fuego. le agregás pedacitos de roquefort y los disolvés también. Más o menos una bandejita de esas de 5 pesos que venden en el super. Y después le agregás 200 cm2 de crema de leche y sal. revolvés un poco más y eso y lo sacás del fuego.
A las papás las dejás hervir un poquito. Pero un poquito, eh? Que no se ablanden mucho. Después las sacás, las secás, y las freís en aceite de oliva y manteca hasta que se doren un poco. Las sacás y les ponés sal.
Después agarrás una fuente para horno y la enmantecás, le ponés la mitad de las papas, un poco de la salsablanca-crema del tarrito y un poco de queso rallado, y de nuevo: papas, el resto de la salsablanca-crema y esta vez mucho queso rallado. Y eso al horno hasta que esté bien dorada la parte de arriba.

Todo esto es para cuatro personas así que si lo hacés para dos, la mitad de todo.

Ahora el pollo: comprás tres pechugas en algún lugar que no sea Avicar porque ahí te van a cobrar 24 pesos. Las cortás en cuadraditos. Ponés tu wok en el fuego con un poco de aceite de oliva y le tiras dos cebollas grandes cortadas en pedazos chiquititos, le ponés sal y después un morrón y una zanahora, cortados igual. Cuando todo eso está medio dorado le agregás los pedazos de pollo y champiñones. Condimentás con sal, pimienta, pimentón, ajo y bastante jengibre en polvo. Siempre revolviendo o mejor, si tenés fuerza en el brazo derecho, tirando el wok para arriba para que los ingredientes salten y caigan dados vuelta, como hacen los chinos y los chefs. Cuando el pollo pasa de tener el color de la parte de adentro de un animal muerto y empieza a tener color de comida, le agregás mucha salsa de soja, una cucharada de miel y las almendras. bajás un poco el fuego y revolvés, revolvés, revolvés, hasta que se espese un poco el líquido y ya está.
Para hacerlo más gurmet y menos chino se puede cambiar el jengibre por vino blanco.
A mí personalmente me gusta más esta misma comida con carne vegetal (o sea pedazos de soja) en vez de pollo, pero hay quienes dicen que parece esponja.

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